La desinfección ambiental es una medida preventiva esencial para reducir la presencia de virus y bacterias en el aire y en superficies de alto contacto, contribuyendo a mantener espacios cerrados y de uso común más seguros.
Ante enfermedades respiratorias altamente contagiosas, como la alerta por Influenza A (H3N2) (también conocida como “super gripe”), la desinfección ambiental ayuda a disminuir de manera significativa el riesgo de propagación y contagio.